Noticias de nuestros peques

Hoy os presentamos a esta belleza negra, Lua.

Sonia nos ha enviado unas fotos preciosas de este bellezón y nos cuenta que tal le ha ido en su nuevo hogar:

Mi nombre es Sonia y adopté a mi pequeña hace casi dos años. Ella, se llama Lúa, es una gata de, aproximadamente, tres años y de color negro y es leucémica. 

Trás recibir el tratamiento, en este último año ha mejorado mucho, incluso, ahora, está a dieta, ya que ha engordado medio kilo en tres meses, aunque a causa de la enfermedad no debe estar en contacto con otros gatos y es más sensible a otras infecciones secundarias, como la sinusitis (por la que sigue a tratamiento).

Se la ve preciosa, Sonia, y muy bien cuidada. Estamos seguras de que nuestra Lua va a seguir dando guerra muchísimos años.
Por desgracia son muchísimos los gatos con leucemia que jamas encuentran un hogar. Lua es una de esas gatas afortunadas que encuentra un humano especial que le da su oportunidad.
Gracias por quererla tanto y enviarnos estas fotos preciosas.

Un abrazo para Lua y su humana Sonia.

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Los gatos leucemicos son gatos con derecho a la vida y a encontrar un hogar. Su esperanza de vida suele ser mas corta, pero juegan, viven, disfrutan de la vida como cualquier otro ser vivo.
Muchos adoptantes se echan atrás ante la idea de adoptar un gato positivo en leucemia, otros optan por el sacrificio negandoles la oportunidad a la vida.
Ningún ser vivo viene con garantía de salud, nadie viene con un certificado de vida larga y salud de hierro bajo el brazo cuando nace, y negarles la oportunidad de un hogar a un ser vivo por que sabemos que va a morir (como todos) es algo que no comprendemos.
Adoptar un animal, sea ciego, cojo, positivo...es un acto desinteresado de amor y generosidad que no debe llevar etiquetas. No se debe, jamas, adoptar un animal pensando en lo que va a durar a nuestro lado, debemos adoptar pensando en todo el cariño que podemos dar a un ser vivo que nos necesita.
Lua tiene suerte, pero hoy en día hay cientos de gatos, quizás miles, que jamas conocerán un hogar y morirán en la calle, o en refugios, en perreras...por que nadie quiere un gato de sus características. Ellos no tienen la culpa de que los humanos les colguemos etiquetas. Ellos nos aman sin condiciones, sin importar si estamos enfermos, tengamos minusvalías o seamos feos a rabiar.
Eso es amor incondicional, algo de lo que todos deberíamos aprender una vez mas.