ZAMI fue recogida el año pasado por un aviso de los vecinos de Zamáns de una gata que tenía un alambre apretándole el abdomen.
Zami resultó ser muy buena en distancias cortas y no nos puso muy complicada su captura. Una vez atendida por el veterinario, le tocaba recuperarse de la herida del alambre y de una herida en la cola. La cual, con el tiempo, vimos que no mejoraba, así que después de unas pruebas nos confirmaron que era un tipo de cáncer
Por suerte, fue bien y hasta hoy, sigue perfecta!
Y por si fuera poco, Zami tuvo más suerte. La suerte de encontrar un hogar para siempre! tiene un carácter un poco especial... el tiempo que estuvo por la sala suelta con el resto de gatos, se ponía muy nerviosa y no se dejaba ni tocar, escapaba despavorida la pobre! Pero, por un catarro, tuvo que estar unos días en jaula para poder medicarla bien, y cuando está cerrada, como decíamos, en distancias cortas, es un verdadero amor! Y Ahí consiguió robar los corazones de María y Alicia, dejándose dar colos, mimos, frotarse y de todo!!
Y ahora en su nuevo hogar, se ha relajado y mantenido ese carácter amoroso, de lo que nos alegramos infinitamente!
Gracias familia por darle esta oportunidad
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