A Brownie la recogimos de su colonia hace año y medio, siendo aún una cachorrita de unos 6 meses.
Tenía la cadera rota, se operó y llevó el postoperatorio bastante bien, de no ser porque era una locuela que a la mínima oportunidad, intentaba darse a la fuga para darse una vuelta por la sala. Lo del reposo nunca fue con ella.
Además de muy inquieta, siempre demandó mucha atención por nuestra parte. Nos maullaba continuamente en cuanto llegábamos pidiendo mimos y más mimos!
Cuando se trataba de interactuar con otros gatos, naaaaa.... Brownie siempre fue de estar con los humanos, así que está feliz!
Desde el primer día pedía a gritos una familia solo para ella y ha tenido la suerte de encontrarla.
Muchísimas gracias Raquel y familia.
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