Que nuestros peques disfrutan las visitas es algo que no nos cansamos de repetir, sobre todo cuando las visitas son tan guapas y encantadoras como Almaz.
Nuestros peludos pudieron disfrutar de sus atenciones un buen rato, incluido nuestro Acosador, que haciendo honor a su nombre, enseguida se puso a la labor de acoso y derribo de nuestra visitante.
Da gusto conocer a una persona con un corazón tan grande y con tanto cariño hacia los animales.
Esperamos volverte a ver otro día, sobre todo nuestros peques.
Un beso enorme.
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